lunes, junio 13, 2005

Este es el próximo post

Maté por decepcionada y regreso por rencorosa. Más ardorosa, amargosa e intolerante que nunca.


Hoy tuve un reencuentro frustroso con la más frustrante actividad de mi vida entera, además de las obsesiones fatídicas y la cantada: el periodismo.
Resulta que estoy en un taller de verano en Reforma, ese periódico fresa cuyas instalaciones son las más nacas que un periódico podría tener. No entraré en especificaciones, pero véalo usted mismo, lector. Lo conmino a pasar un día por Universidad, a la altura de metro Zapata. Ya verá que no le digo mentiras.
Y entonces todo me chocó. Me chocaron los compañeros y me chocaron las maestras y me choca Reforma todito porque es de-derecha-y-son-re-fresas y su línea editorial es re-fresa-dirigida-a-gente-pudiente y a mí qué, yo no estoy para ponerme de tovarich pero fuchi, y así.
En el examendepersonalidad puse que era bien sociable, que era bien fácil para mí hacer amigos. Mentira. Hoy no hablé con nadie y todos me cayeron re mal por adultos contemporáneos.

Bueno ya.

Próximamente, el próximo post.

3 comentarios:

Cory dijo...

Pues mi profe de Política exterior escribe en el Reforma, y es una ironía con patas, según libros de España, uno de los teóricos MARXISTAS más célebres en Latinoamérica, pero se me hace que era un prehisto-chairo (Güey, fuíste a Bulgariaaaa -su primer viaje-) ¡Chale! No debería hablar mal de él, me cae bien.
En fin, ahora da clases, escribe en el Reforma y juega ténis en el club.

Malakatonche dijo...

La melcocha pródiga, ahora debe de ser el título de tu blog.

Anónimo dijo...

eso es todo, sino le cae el mundo-reforma no hay porque hablar
u_u'